La diabetes mellitus es un grupo de enfermedades metabólicas que provocan un aumento incontrolado de los niveles de glucosa en sangre (hiperglucemia). Normalmente, la hormona insulina, producida por el páncreas, controla la absorción de glucosa por las células y el metabolismo de los carbohidratos en el cuerpo. Diversas condiciones patológicas pueden provocar una secreción insuficiente de insulina (diabetes tipo I) o resistencia celular a esta hormona (diabetes tipo II). Los médicos consideran que los síntomas de la enfermedad son micción frecuente, sed constante y una fuerte sensación de hambre. Sin tratamiento, el aumento de los niveles de azúcar en sangre puede complicarse con enfermedades del corazón, los vasos sanguíneos, el sistema nervioso, las extremidades inferiores y los órganos de la visión.
La diabetes mellitus es una de las enfermedades más comunes del sistema endocrino. Se diagnostican diferentes tipos de diabetes en aproximadamente el 8% de las personas a lo largo de su vida, y los patrones dietéticos generalizados aumentan el número de pacientes cada año. Con un tratamiento sintomático y una dieta adecuados, la calidad de vida de los pacientes se mantiene a un nivel decente.
Sobre la enfermedad
La diabetes ocupa el segundo lugar en términos de frecuencia de detección entre todas las patologías endocrinas. La enfermedad ocurre en una de cada diez personas y también hay formas ocultas, cuando el paciente ni siquiera es consciente del problema. La razón principal es la falta de insulina, lo que altera todos los procesos metabólicos.
Especies
Según la clasificación de la diabetes mellitus, existen formas sintomáticas y verdaderas. El primero se desarrolla en el contexto de una enfermedad particular y desaparece una vez que se elimina la causa. La verdadera diabetes se divide en dos tipos.
- Tipo I: diabetes insulinodependiente o infantil. Suele desarrollarse en la infancia o la adolescencia. Causado por la falta de insulina en el cuerpo, en el contexto de daño a las células pancreáticas. Las personas con este tipo de diabetes requieren insulina externa constante.
- Tipo II: diabetes no insulinodependiente o de inicio en la edad adulta. Se desarrolla con mayor frecuencia en la edad adulta, pero ahora también se ha vuelto común entre niños y adolescentes. Es causada por la insensibilidad de los tejidos del cuerpo a la insulina, como resultado de lo cual dejan de absorber normalmente la glucosa. Las personas con este tipo de diabetes pueden controlar sus niveles de azúcar en sangre con una dieta adecuada, actividad física y medicamentos para reducir el azúcar en sangre. En casos severos, puede ser necesario el uso de insulina.
Destaca la diabetes en mujeres embarazadas (diabetes gestacional). Se desarrolla exclusivamente durante el embarazo y desaparece después del parto. Requiere dieta y, si esto no ayuda, terapia con insulina.
La gravedad de la diabetes depende del nivel de control del azúcar en sangre y de la presencia de complicaciones. Existen varias clasificaciones, la principal de las cuales se basa en el nivel de hemoglobina glucosilada (HbA1c). Este es un indicador que refleja el nivel promedio de azúcar en sangre durante los últimos 2 a 3 meses.
- Grado leve (HbA1c inferior al 6, 5%): los niveles de azúcar en sangre están dentro de los límites normales o cerca de lo normal, las manifestaciones de patología son mínimas.
- Moderado (HbA1c 6, 5-7, 9%): los niveles de glucosa están ligeramente elevados, hay síntomas específicos o signos iniciales de complicaciones.
- Grave (HbA1c 8% o superior): caracterizado por un nivel significativo de glucemia, síntomas graves y complicaciones.
Según criterios similares, también se distingue la diabetes mellitus compensada, subcompensada y descompensada.
Síntomas de diabetes
Los síntomas dependen de la forma y gravedad de la enfermedad. La diabetes tipo 1 se desarrolla más rápido y a menudo causa complicaciones en los jóvenes, mientras que la diabetes tipo 2 puede no mostrar ningún síntoma durante mucho tiempo. A menudo, la patología solo se puede detectar mediante estudios especiales.
Posibles síntomas y signos:
- Necesidad frecuente de orinar y aumento del volumen de orina;
- Sed intensa y consumo de grandes volúmenes de líquido;
- Sequedad de la mucosa oral;
- Deterioro de la agudeza visual y mareos;
- Apetito pronunciado, glotonería;
- La aparición de úlceras en diferentes partes de la piel, cicatrización prolongada de heridas;
- Insomnio y fatiga;
- Disminución del rendimiento;
- Pérdida de peso u obesidad inexplicable;
- Aparición frecuente de enfermedades infecciosas.
Sólo un médico puede distinguir con precisión los signos de los diferentes tipos de diabetes. El curso prolongado de la enfermedad contribuye a la aparición de síntomas adicionales asociados con complicaciones.
Causas de la diabetes
La diabetes mellitus se produce debido a una disfunción del páncreas o a un trastorno de la regulación celular, en el que ni siquiera una producción suficiente de insulina ayuda a reducir los niveles de azúcar en sangre. Los médicos incluyen la obesidad, las patologías pancreáticas, la baja actividad física, la herencia desfavorable y otras condiciones como factores de riesgo de la enfermedad. La diabetes tipo 1 suele diagnosticarse en hombres y mujeres antes de los 30 años. Las personas mayores obesas tienen más probabilidades de tener diabetes tipo II. Al mismo tiempo, pueden ocurrir diferentes tipos de trastornos en pacientes de cualquier edad, por lo que no debes centrarte únicamente en los factores de riesgo.
Posibles causas y factores de riesgo:
- Trastornos genéticos que contribuyen al desarrollo de enfermedades autoinmunes y patologías pancreáticas. Tener familiares con diabetes es un factor de riesgo importante;
- Obesidad. La acumulación de exceso de tejido graso contribuye a los trastornos metabólicos, en los que los tejidos se vuelven menos sensibles a la insulina;
- Disfunción inmune, caracterizada por daño al tejido pancreático;
- Infecciones virales y efectos de las toxinas en el páncreas;
- Tomar corticosteroides y otros medicamentos que contribuyan al desarrollo de diabetes;
- Disfunción suprarrenal;
- Patologías cardiovasculares.
La diabetes mellitus rara vez es una enfermedad congénita, pero los factores hereditarios provocan el rápido desarrollo de esta enfermedad a cualquier edad.
Diagnóstico de diabetes mellitus.
Para diagnosticar la enfermedad, es necesario concertar una cita con un endocrinólogo. El médico realiza una consulta durante la cual examina las quejas del paciente y recopila una anamnesis para identificar los factores de riesgo de diabetes. Un aumento persistente de los niveles de azúcar en sangre y otros signos clínicos de diabetes se detectan mediante estudios especiales, por lo que el endocrinólogo, previa consulta, prescribe todos los procedimientos necesarios.
Exámenes realizados:
- Análisis de sangre en ayunas. El endocrinólogo pide al paciente que se abstenga de comer unas horas antes de acostarse y por la mañana antes del estudio. Durante el procedimiento, el especialista trata la piel del dedo con un antiséptico, realiza una pequeña punción con un escarificador y recoge una pequeña cantidad de sangre en un recipiente especial. Un signo de diabetes mellitus puede ser un contenido de glucosa superior a 6, 5 mmol/l en la muestra obtenida;
- Análisis de sangre para determinar el contenido de hemoglobina glicosilada. El nivel de esta sustancia indica el nivel de glucosa en la sangre durante 3 meses, por lo que el médico prescribe dicha prueba para el diagnóstico primario y el seguimiento del tratamiento de la diabetes. Una concentración de hemoglobina glicosilada superior al 6, 5% indica la presencia de diabetes mellitus;
- Prueba de carga. La primera etapa del estudio es una determinación estándar de los niveles de glucosa en sangre en ayunas. Luego, el médico le pide al paciente que beba un vaso de agua con azúcar y después de 2 horas le repite el análisis de sangre. Si los resultados de la primera prueba revelan un nivel moderado de glucosa en sangre (hasta 6, 5 mmol/l), y la segunda prueba indica un aumento significativo del nivel (aproximadamente 11 mmol/l), entonces se confirma el diagnóstico;
- Análisis de sangre para determinar el contenido de péptido C. Un endocrinólogo prescribe esta prueba para evaluar de manera confiable la producción de insulina durante un período de tiempo determinado;
- Análisis de sangre realizado en cualquier momento. Esta prueba se utiliza para confirmar los signos de la enfermedad. Una concentración superior a 10 mmol/L de glucosa en varias muestras de sangre, independientemente de la hora de la comida, indica la presencia de diabetes mellitus;
- Análisis de orina. Los pacientes con diabetes tienen niveles elevados de glucosa en la orina. Además, la orina del paciente puede contener cuerpos cetónicos, lo que indica una alteración en el metabolismo de la glucosa.
Si es necesario, el endocrinólogo prescribe consultas con un neurólogo, cardiólogo, nefrólogo y otros especialistas para excluir complicaciones peligrosas de la enfermedad. Las mujeres embarazadas deben consultar a un obstetra-ginecólogo.
Opinión de expertos
La diabetes mellitus es una enfermedad muy peligrosa y al mismo tiempo común. Puede estar precedido por un largo período de hiperglucemia, que no produce síntomas, pero también es posible una aparición rápida cuando, bajo la influencia de uno u otro factor, surgen síntomas pronunciados de diabetes mellitus. Tendrás que ser tratado contra esta enfermedad por el resto de tu vida, ya que si no se controla, tu nivel de azúcar volverá a aumentar. Si el paciente ignora el tratamiento, puede experimentar complicaciones de la patología: coma hipo o hiperglucémico, complicaciones cardiovasculares, discapacidad visual (retinopatía diabética), patologías de las fibras nerviosas (neuropatía diabética). En casos graves, se desarrolla gangrena, que generalmente afecta a los dedos de los pies.
Tratamiento de la diabetes
El endocrinólogo estudia los resultados del diagnóstico y prescribe el tratamiento adecuado. Los principales objetivos son reducir los niveles de glucosa en sangre, prevenir el desarrollo de complicaciones y eliminar los síntomas desagradables. Además de la terapia con medicamentos, el endocrinólogo debe prescribir al paciente una dieta especial para controlar los niveles de azúcar en sangre. El cumplimiento de todas las recomendaciones del médico permite mejorar significativamente la calidad de vida y evitar las consecuencias negativas de la diabetes.
Para corregir la patología se utilizan dos tipos de terapia con medicamentos.
- Recetar medicamentos que reducen los niveles de glucosa en sangre. Dependiendo de los resultados del diagnóstico y del historial médico del paciente, el endocrinólogo prescribe sulfonilureas, meglitinidas, inhibidores de la alfaglucosidasa, biguanidas o tiazolidinedionas. A menudo es necesario tomar varios medicamentos con estricto cumplimiento de la dosis y control de los niveles de azúcar en sangre. Los medicamentos enumerados mejoran la producción de insulina por parte del páncreas, estimulan la sensibilidad de los tejidos a la glucosa y reducen la ingesta de glucosa de los alimentos;
- Administración de insulina mediante inyección. El endocrinólogo prescribe este tipo de tratamiento a todos los pacientes con diabetes mellitus tipo 1 y a pacientes con diabetes mellitus tipo 2 si los medicamentos que reducen los niveles de azúcar en sangre son ineficaces o están contraindicados. La terapia con insulina también se prescribe a mujeres embarazadas con diabetes gestacional. En primer lugar, el endocrinólogo prescribe inyecciones de insulina de acción prolongada; este medicamento debe tomarse una vez al día, independientemente de la nutrición. Las preparaciones de insulina de acción rápida se administran en los hospitales para el tratamiento de formas complicadas de diabetes y con un fuerte aumento de los niveles de azúcar en sangre. El médico explica las reglas para el uso de inyecciones y las dosis requeridas. La consulta también explica la importancia de controlar periódicamente los niveles de azúcar en sangre mediante glucómetros.
El endocrinólogo selecciona un régimen de tratamiento individual y también ajusta la dosis de los medicamentos y las prescripciones durante el tratamiento. Las consultas repetidas le permiten resolver problemas asociados con las complicaciones de la enfermedad y los efectos secundarios de los medicamentos. Además, el especialista debe mostrar cómo administrar el medicamento y explicar todas las reglas del tratamiento.
Prevención de la diabetes
Cada año, la diabetes se diagnostica cada vez con más frecuencia. El consejo médico ayudará a prevenir el desarrollo de esta enfermedad.
Principales métodos de prevención:
- Normalización del peso corporal y actividad física moderada;
- Tratamiento oportuno de enfermedades pancreáticas;
- Una dieta saludable que incluya un consumo adecuado de verduras y frutas.
Preguntas y respuestas
¿Cómo comienza el diagnóstico de diabetes mellitus?
Para identificar la patología, en primer lugar, se dona sangre para determinar los niveles de azúcar en sangre. Si hay desviaciones, el médico ordenará pruebas adicionales.
¿Cómo prevenir las complicaciones de la diabetes?
Siga las recomendaciones de su médico con respecto a la dieta y los medicamentos. El criterio principal son las concentraciones normales de glucosa en sangre.